La gran distracción popular permanente en el viejo Agua Buena estuvo representada por el Cine, inicialmente propiedad; como casi todo en el pueblo, del Ingenio. Para la década de los cincuenta la empresa lo traspasa a una Cooperativa, un grupo de socios obreros que administran el negocio y se turnan por prolongados periodos al frente del mismo.
El corte de los filmes estaba en su mayor exposición representada por los dramas del cine nacional, muestras del México rural que sobresaltaban los valores, pudores y gallardas figuras montados en actitudes de justicieros y románticos cabalgantes.
Posteriormente arribaron como muestra de la innegable aculturación, tácita, constante, con puños, polvo, indios y balazos, las películas de “Durango Kid”, paladín que fuera desplazado, en aquella vetusta y amplia tela blanca, por la presencia carismática del enmascarado de plata.
Las funciones se daban solo un día por semana, pero debido al concurrido flujo se incorporaron exhibiciones los viernes, sábado y domingo.
Dicho Cine se ubicaba en el Salón central del edificio de doble planta, mismo que albergaba, en su esquina Sur la Cárcel Municipal, en la parte superior se ubicaban las Oficinas de la Sección 86 de azucareros y las propias de la Presidencia Municipal. Inmueble entre la Turbina y la Casa Hacienda.
Le compartimos un poco más, citando textualmente los siguientes contenidos:
“Agua Buena, S. L. P. a 11 de mayo de 1942.
Sr. Enrique Zubiaga.
Ciudad de Cárdenas, S. L. P.
Muy Sr. Mío:
Ruego a usted de la manera más atenta tener a bien, si es que le sea posible, continuar enviándonos la película que tenga cada jueves, y al mismo tiempo, al poder atendernos, enviarnos los días miércoles la propaganda respectiva para exhibirla los jueves y devolvérsela los viernes precisamente.
Sin otro particular me repito suyo afmo y s.s.
Pascual Martínez Trejo”.
Con lo anterior nos queda claro que las películas venían de Cárdenas, San Luis Potosí y, que decirlo, viajaban por ferrocarril.
“C. Tesorero Municipal.
Presente.
Hago saber a usted para su debido cumplimiento, que el impuesto por cada función de CINE, desde el mes de abril por el resto del presente año, debe cobrarse en esa Oficina a los causantes, a razón de $5.00 y adicionales, quedando suspendido el cobro mensual que antes se había venido observando.
Lo tendrá entendido para su observancia.
Sufragio Efectivo. No Reelección.
Agua Buena, S. L. P. a 6 de mayo de 1942.
Presidente Municipal, Pascual Martínez Trejo”.
Los impuestos, impuestos.
El 7 de Septiembre de 1943 el Síndico Municipal Sr. Odilón Méndez, pide al Presidente Municipal que responsabilice al señor B. B. Perkins de las funciones de cine, ya que el manipulador del aparato proyector siempre anda borracho y ello puede provocar algún incendio (como el ocurrido en Zacatepec, Morelos), así se deslindan de responsabilidades.
En Febrero 28 de 1951, el Comité Pro Mejoras Materiales de Agua Buena, teniendo como su Presidente a Zenón Torres, como Secretario E. Montoya, y Tesorero G. Reyes. Se quejan de que la empresa del cine no permitió que se instalaran juegos mecánicos en el pueblo, con ello la Delegación no cobra Piso de Plaza y el Comité no recibe ingresos, actitud que denota la rivalidad del cine para con cualquier otra diversión.
En Mayo 9 del mismo año, el C. Abundio García Vera, Presidente de la Sociedad Cinematográfica de Agua Buena, avisa a la Presidencia Municipal, que con esta fecha quedan suspendidas las funciones de cine, hasta que inicie la zafra. El aviso se entiende desde el punto de vista del pago de contribuciones.
En sí, el Cine de Agua Buena, excelente tema del recuerdo, de las delicias que el tiempo y la tecnología sepultaron en la memoria de quienes lo disfrutaron aún en los años setentas.
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